Consideraciones generales sobre primeros auxilios

Consideraciones generales sobre primeros auxilios

Primeros auxilios
Autor
Fraternidad-Muprespa

A lo largo de nuestra vida, son múltiples las ocasiones en que una persona puede encontrarse ante una situación de emergencia frente a un accidentado: en casa, en el trabajo, en la carretera, etc...

En estas situaciones es fundamental adoptar una serie de medidas básicas e inmediatas antes de que los Servicios Médicos Especializados se hagan cargo de la víctima.

De esta actuación previa puede depender en gran medida la evolución posterior o incluso la vida de la misma. Por lo tanto, se debe tener un actitud activa ante una emergencia, acompañada de los conocimientos mínimos necesarios.

Para evitar agravar o empeorar las lesiones que sufre un herido, solo haremos aquello de lo que estemos totalmente seguros, siendo imprescindible el conocimiento y aprendizaje de las técnicas básicas de PRIMEROS AUXILIOS, que aplicaremos a los distintos tipos de lesiones, procesos y accidentes en los que podamos actuar.

Fundamentalmente aquellos más relacionados con las condiciones de trabajo y sus riesgos asociados, aunque no se pueda hacer referencia expresa a todos.

Para todos los casos siempre tendremos en cuenta cuáles son los objetivos fundamentales de los PRIMEROS AUXILIOS:

• Mantener vivo al accidentado.

• Aliviar sus sufrimientos.

• Prevenir nuevas lesiones.

• Ponerle lo antes posible en manos de los médicos.

ACTITUD Y ACTUACIÓN PREVIA A LA VALORACIÓN

1.- Tranquilidad: Hay que actuar con rapidez pero sin nerviosismo.

Mantener la calma y transmitir serenidad.

2.- Hacerse una composición de lugar.

Actuar según el siguiente orden:

A. VALORACIÓN PRIMARIA

Con ella se pretende descartar la existencia de una amenaza inminente para la vida del accidentado.

Pautas generales de actuación:

- Valorar el estado de consciencia.

- Valorar la respiración.

- Valorar la circulación.

B. VALORACIÓN SECUNDARIA

Una vez hecha la valoración primaria y haber asegurado el mantenimiento de las funciones vitales, se debe buscar la existencia de otras lesiones.

Tranquilizar al accidentado, e informarle que se va a revisar por orden las distintas partes de su cuerpo:

CABEZA

- Buscar la presencia de heridas y/o contusiones en cuero cabelludo y en la cara. Observar si existe salida de sangre por la nariz, o por los oídos. Podrían ser un signo de fractura del cráneo.

CUELLO

- Tratarlo con sumo cuidado a la menor indicación de dolor por parte de la víctima.

- Si hay que moverla, mantener la cabeza-cuello-tronco como si fuera un bloque rígido.

- Valorar el pulso carotideo.

- Aflojar las prendas ajustadas a su alrededor.

TÓRAX

- Buscar la presencia de heridas y/o deformidades que hagan sospechar una fractura.

- Valorar los movimientos respiratorios y si existe dificultad para respirar. Preguntar si existe dolor y localizarlo.

ABDOMEN

- Buscar la existencia de heridas.

- Preguntar si existe dolor y localizarlo.

- Notar si está duro o al contrario, depresible.

- Pensar en la posibilidad de lesiones internas.

EXTREMIDADES

- Buscar la existencia de heridas.

- Preguntar si existe dolor y localizarlo.

- Notar si está duro o al contrario, depresible.

- Pensar en la posibilidad de lesiones internas.

- Examinar los brazos y las piernas (intentando moverlos lo menos posible) en busca de heridas, puntos sangrantes, deformidades, inflamación, etc...

- Explorar la sensibilidad (pellizcando la piel) y la movilidad de brazos y piernas (pidiendo a la víctima que mueva los dedos de las manos, y de los pies), para descartar una lesión de la médula espinal.