Los beneficios de romper con el tabaco
Según la Organización Mundial de la Salud el tabaco mata a la mitad de sus consumidores. De hecho, cada año más de 8 millones de personas fallecen por este motivo, 7 millones por consumo directo y en torno al millón por la exposición involuntaria al humo del tabaco.
En España, según cifras del Ministerio de Sanidad, el 22% de la población fuma a diario y un 2% es fumador ocasional. Si lo separamos por género cerca de una cuarta parte de los hombres son fumadores habituales, frente a casi un 18% de las mujeres. Dentro de estos porcentajes un 25% de la población española es ex fumadora. Y es, precisamente, en esa figura en quien nos vamos a detener para analizar qué ocurre cuando dejamos el tabaco.
Los efectos que tiene abandonar el tabaco son notorios en la lucha contra estas enfermedades pero también en otros órdenes de la vida. En este repaso puedes ver todo lo que vas ganando si dejas de lado el paquete de cigarros:
- A los 25 minutos: En menos de media hora se normalizan la presión sanguínea y el ritmo cardiaco.
- A las 8 horas: Recuperamos los niveles habituales de oxígeno en sangre
- En 5-7 días: En una semana la nicotina abandonará paulatinamente nuestro cuerpo y empezaremos a notar mejoras en nuestro aspecto, piel y pelo, y en nuestros sentidos, gusto y olfato.
- En seis semanas: Se empiezan a limpiar los pulmones.
- A los 3 meses: Recuperas un 30% de la función pulmonar perdida
- En 9 meses: Mejoramos nuestra respiración, disminuyen las toses y cambian nuestras sensaciones en el rendimiento deportivo.
- A los doce meses: El riesgo de enfermedades cardiacas se reduce a la mitad
- Después de 5 años: Se reduce en un 50% el riesgo de cáncer de boca, garganta, esófago y vejiga.
Relacionado con este último dato vale la pena recordar que según un estudio recogido por la Asociación Española contra el Cáncer el consumo de tabaco puede estar detrás de hasta 8 de cada 10 casos de cáncer de laringe y pulmón. Además, la exposición al humo del tabaco, como fumador pasivo, aumenta el riesgo a padecer este problema. En lo que al EPOC (Enfermedad pulmonar obstructiva crónica) se refiere es un problema particularmente alto entre las personas que comienzan a fumar a una edad temprana, ya que el humo del tabaco retrasa significativamente el desarrollo pulmonar.
El deporte es un gran aliado en nuestra lucha contra el tabaco
Datos como los que hemos comentado nos pueden animar a que dejemos el tabaco. Sin embargo, hay enemigos como la ansiedad o la irritabilidad que hacen más complicado el camino. Ante eso la práctica deportiva se puede convertir en un gran aliado.
Cuando dejamos el tabaco existe una tendencia a subir de peso. En torno a tres kilos en la mayoría de casos. Para que esa situación no se dé y para sentirnos mejor nosotros mismos hay tantas opciones como deportes conoces. Con ellos disfrutaremos de todos estos efectos positivos:
- Elimina la ansiedad que nos genera haber dejado de fumar
- Reduce los niveles de tensión y colesterol
- Facilita nuestro descanso
- Mejora nuestros estados de ánimo