La Organización de Salud Mundial (www.oms.org) define la tartamudez como "un desorden en el ritmo de discurso en el que el individuo sabe lo que desea decir, pero al mismo tiempo puede tener dificultad para decirlo debido a una repetición involuntaria, prolongación, o cesación de su discurso.”

Sin embargo, la tartamudez no implica retraso mental, ya que ha lo largo de la historia ha habido célebres tartamudos como Aristóteles, Virgilio, Demóstenes, rey Carlos I, Charles Darwin, Newton o Marilyn Monroe.